Debido a que las personas adultas y los pacientes con enfermedades crónico degenerativas como obesidad, diabetes e hipertensión son los más proclives a contagiarse por COVID-19, las y los michoacanos deberán celebrar la temporada navideña de forma distinta para no poner en riesgo la salud de sus familias.
Y es que de acuerdo con cifras de la Secretaría de Salud de Michoacán (SSM), de las 2 mil 338 defunciones registradas por COVID-19, cerca del 60 por ciento corresponden a adultos mayores, en tanto que alrededor de un 40 por ciento es de personas que padecían hipertensión.
Por lo anterior, las autoridades sanitarias llaman a celebrar la Navidad y el Año Nuevo en el ámbito del hogar así como suspender reuniones masivas, fiestas, posadas y verbenas pues la concentración de personas, es un factor de riesgo que puede provocar la propagación del virus.
En este contexto, se sugiere programar de manera escalonada las compras navideñas o aprovechar los sistemas en línea para evitar la saturación en mercados públicos, plazas comerciales o establecimientos en general y en los que existe el peligro de contraer la enfermedad.
Asimismo, también es importante no asistir a peregrinaciones ni organizar posadas, ferias o fiestas populares y evitar hacer reuniones donde haya adultos mayores o personas vulnerables o con enfermedades crónico degenerativas.
En ese sentido, las autoridades subrayan que los pacientes asintomáticos, son los que en su mayoría mantienen activa la cadena de contagio en su círculo familiar, laboral o social, ya que al desconocer que son portadores de COVID-19 llevan su vida con normalidad corriendo el riesgo de contagiar a otras personas.
De ahí la importancia de que todas y todos los michoacanos, sin excepción, adopten el uso permanente del cubrebocas, además de realizar constante lavado o desinfección de manos y mantener una distancia de por lo menos un metro y medio entre personas.
Por: Oscar Mendoza